lunes, 10 de marzo de 2008

D.E.P.


En mi opinión me parece triste. No ha insultado, no se ha puesto a gritar en ningún sitio ni se ha sacado la foto con las víctimas del terrorismo. Aunque no lo voté, por que consideraba que mi voto debía ser de confianza a nuevos proyectos, me entristece su perdida.
Empiezo a sospechar que si no ladras no te escuchan. Que los medios de comunicación sólo crean noticias sobre las broncas, los insultos o los gritos. Cuando eres una persona que habla con calma aunque estés encabronadísimo, no sales por la tele.
Hablaré de mi experiencia personal. He tenido encuentro cara a cara con dos de los tres candidatos. Fui profesor de inglés de las hijas de Zapatero, cuando yo era más joven y él, líder de la oposición. Un día les puse a los monstruos de deberes una redacción: " El coche de mi padre". La hija mayor de Zapatero levantó la mano para preguntarme que de cual de los cinco coches que había en su casa lo hacía. Si del que usaba para ir al parlamento, el todo-terreno, el Mercedes, el BMW o el clase A de su mamá. ( Puse cara de póquer y le dije que de cualquiera de ellos). Mi encuentro fue con una ventanilla tintada que se abría para llamar a sus hijas.
A Llamazares nos lo encontramos Berti ( que no Bertus) y yo en un Kebab. Había más gente, pero no recuerdo quién. El cenaba con su mujer y su hija. Al pasar a pedir, le dimos las buenas noches y nos sonrió. Siguió cenando tranquilamente.
Empiezo a pensar que este no es país para gente con principios.
Buena suerte, sea lo que sea a lo que te vayas a dedicar ahora.